Mujer

 


Mujer de mil letras; amante de las estrellas. 

Mujer de eones; autora de bellas ilustraciones, 

Marcadas en el centro del alma y de mi mente.

Dueña de espacios y de cada uno de mis rincones; 

Mujer de luces centellas y hermosas ilusiones. 

Quien me roba el sueño y me arranca el aire; 

Me provoca aflicciones y secuestra mi corazón danzante.


Espero callado; espero aunque resignado, 

De volver a ver el brillo posarse en este, 

Tú humilde esclavo. Mujer que jamás he olvidado, 

Permanezco anclado al sentimiento que te he jurado.

Que aunque vueles lejos de mis horizontes, 

Yo aún te pienso aunque sea en días nublados. 

Mujer que tanto he deseado, aquella que con su mano, 

Me regresaba las fuerzas para seguir andando.


Reina de mis castillos y acompañante de mis escondrijos. 

Por quien se elevan cada día estos vicios; 

Que se apoderan de mí, me ayudan subsistir y me consuelan, 

Me dan un poco de alivio.

Mujer fascinante; la misma que continúa añorando este errante. 

Quien anido en este corazón vacilante. 

Se apodero del tiempo y mis pensamientos. 


Tú, mujer que reclamo mi vida triunfante.

Nuestra vida ya no es compartida; 

Se acabaron las risas y las alegrías. 

En recuerdos y en fotografías, 

Queda lo que fuimos algún día. 

Más sin embargo, el sentir no se apaga, 

Aunque acepte entre lagrimas tú partida.


- José Javier F. G.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario