Veo hojas caer,
Desde mi ventana, veo las hojas correr.
Hay una brisa templada;
Que nutre el alma,
Hay nostalgia rondando por las mañanas.
Es perfecto el tiempo,
Que paso mirando el cielo;
Componiendo sonetos
O al menos lo intento,
Pensando en tu mirada;
En tus caderas
Y en tu sonrisa enmarcada.
Ya llego el otoño,
Con aire embelesado
Y un dejo de asombro.
Atardeceres de rojo intenso;
Que se encienden cual corazón ardiendo,
En pasión y vigor.
Las tardes que me roban el aliento;
Perplejo por completo,
Imaginando que contigo paseo,
Conversando sin prisa y con esmero.
Quizá contándote que el otoño guarda misterios;
Quizá envuelto en vehementes sentimientos,
Que surgen como fuego,
Quemando todo por dentro.
Son las tardes perfectas,
Para componer algunos versos,
Cargan pasión y estremecen el corazón,
Que se vuelca en exaltación
Y no hay comprensión de la razón.
Que lo más bello de mi día,
En este otoño,
Sea ver tu sonrisa;
Que lo más importante de mis horas,
Sea pasar el tiempo contigo a solas,
Porque el otoño es más hermoso,
Acompañado de tu persona.
José Javier F. G.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario